BALOR - LOS ENEMIGOS
Horrible habitante de Irlanda.
Su vida y su reinado dependían de que mantuviera cerrado su ojo ya que con él podía matar a cualquier ser vivo que mirara.
Esto era el resultado de una maldición que le arroja su padre cuando era niño, por espiar en su cuarto de magia.
Según la leyenda, Lugh lo mató arrojando una piedra, que hizo que el ojo volara hasta el cielo.
Cuando sale esta carta ha llegado la hora de prestar atención a las miradas que nos impiden crecer.
A Balor le decían "Balor mal ojo". Esto nos indica que ha llegado la hora de revalorizar las miradas de los otros.
Puede significar también un tiempo de revisión de nuestra mirada hacia los otros, por eso se aconseja apertura hacia otras visiones más amplias.
Sugiere una situación en la cual nos encontramos atrapados por los hechos, con el mundo en contra.
Todo enfrentamiento con la realidad es difícil, por tanto, aparece un enorme temor a realizar los ajustes necesarios.
Entonces es muy posible que de no mediar otra carta que indique lo contrario, no modificará la situación, ya sea una mala pareja o un trabajo insatisfactorio.
El mensaje es cuidado con el entorno.
Claves: obstáculos, interferencias.
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